Con el comienzo de un nuevo mes, llegan los aumentos que se ajustan de manera automática cada 30 días. Entre ellos se encuentran los servicios de gas, electricidad y agua.

Luz y gas

A partir del próximo mes entrará en vigencia el nuevo cálculo de ajuste que quiere implementar el Ministerio de Economía para las tarifas de gas y electricidad. Si bien en un primer momento el equipo económico había fijado una fórmula polinómica de ajuste automático, que tenía en cuenta la variación salarial y la inflación minorista (IPC) y la mayorista (IPIM), el cálculo nunca vio la luz, ya que se suspendió su implementación en mayo y junio.

A partir de julio, por lo tanto, comenzará a regir una nueva variable de ajuste que tendrá en cuenta la expectativa de inflación futura, según confirmó la Secretaría de Energía. Todavía el Palacio de Hacienda no definió cómo se hará ese cálculo, pero si se tiene en cuenta que se espera una inflación de 5% para el próximo mes, los aumentos en las boletas finales de gas y electricidad no superarán el 3%.

En lo que va del año, las tarifas de electricidad subieron 234% y las de gas, 1179% en promedio entre aumentos de precios y de cantidades consumidas, según cálculos del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), que depende de la UBA y el Conicet. “El costo de la canasta total de servicios públicos en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se incrementó 365% respecto de diciembre pasado, a partir de las actualizaciones de tarifas de transporte (enero y febrero), energía eléctrica (febrero y junio), agua y gas natural (abril y junio). Los consumos de gas natural y energía eléctrica están ajustados por estacionalidad del consumo”, dice.

Agua

Las boletas de Aysa volverán a subir menos de 2% en julio, luego del aumento de 2,77% de junio y del 209% en abril. Para el servicio de agua, la Secretaría de Obras Públicas estableció una fórmula automática de ajuste mensual que tiene en cuenta el índice de salarios, el de precios internos al por mayor (IPIM) y el del precio al consumidor (IPC).

Nafta y gasoil

A partir del lunes 1° de julio volverá a subir el impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), según lo que dispuso el Ministerio de Economía a través del decreto 466/2024. Además, como es habitual, las compañías –YPF, Shell, Axion y Puma Energy– podrían trasladar la devaluación mensual de 2% que aplica el Banco Central (BCRA).

Por lo tanto, la nafta y el gasoil subirán al menos 3%. El litro de nafta súper de YPF en la ciudad de Buenos Aires (CABA) cuesta actualmente $905, mientras que la premium vale $1117. El gasoil súper cuesta $941, mientras que el diésel premium, $1196.

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