La presión del kirchnerismo y los gobernadores para eliminar las Primarias colisiona contra el deseo del Presidente. El plan preventivo de Juntos por el Cambio y la incomodidad de los libertarios
El efecto cascada es inevitable. La eventual suspensión de las Primarias inunda de incógnitas y especulaciones a todos los espacios políticos. El Frente de Todos, una vez más, dividido por el desborde de sus vertientes: la presión del kirchnerismo y los gobernadores, la resistencia de Alberto Fernández y las organizaciones sociales. En Juntos por el Cambio, donde el rechazo es unánime, se encienden las alarmas del PRO y las calculadoras de la UCR. Por las dudas, Mauricio Macri pidió elaborar un plan de contingencia que ya fue diseñado y aprobado. Colisionan las diferentes posturas en la Izquierda y se incomodan los libertarios por tener que admitir que los seduce la iniciativa del oficialismo. Las tensiones internas y los esquemas de emergencias frente a la posibilidad de un 2023 sin Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias. ¿Qué pasa si no hay PASO?
Frente de Todos
“Mi mayor aspiración es que en 2023, desde el último concejal hasta el presidente de la República, lo elijan primero los compañeros”, expresó el Presidente el 17 noviembre del año pasado. Ante una Plaza de Mayo colmada de militantes peronistas, Fernández realzó el mecanismo de selección de las Primarias y habilitó conjeturas sobre un intento de reelección. Habían pasado tan solo 72 horas de la derrota electoral y en Casa Rosada no imaginaban que la feroz crisis interna desembocaría en una figura presidencial opacada por el desembarco de Sergio Massa en el ministerio de Economía.
“La discusión está abierta”, respondió el mandatario diez meses después, cuando le preguntaron sobre la insistencia de algunos dirigentes del Frente de Todos por la suspensión de las PASO. “No podemos tener dos elecciones para una misma cosa”, sostuvo el ministro bonaerense Andrés Larroque. “Creo que el año que viene no van a servir”, agregó la senadora provincial Teresa García. “No corresponde cambiar las reglas de juego faltando seis meses para el cierre de listas”, cruzó el diputado Leandro Santoro. Los deseos de Fernández se topan con el armado que imagina el entorno de la vicepresidenta: un proceso electoral sin Primarias y con una fórmula oficialista única. En la misma sintonía, en la Provincia, dirigentes cercanos al gobernador Axel Kicillof conversan en privado y tantean posturas en la Legislatura para proyectar una posible discusión en el recinto. El panorama es complicado por la relación de fuerzas entre oficialismo y oposición, casi empatada en ambas Cámaras. Sobra voluntad, faltan votos. Las gestiones están.
Los gobernadores también presionan. La justificación es política y económica. Indican que con el correr de los años las Primarias perdieron el sentido para el que fueron creadas y que los fondos destinados a su ejecución (entre 22 mil y 30 mil millones de pesos) podrían ser redireccionados a obras públicas. “Nunca estuve de acuerdo con las PASO”, expresó el santafesino Omar Perotti. “Es una situación atípica del país, hay que estudiar su suspensión”, argumentó el entrerriano Gustavo Bordet. Ambos se manifestaron en línea con la postura del cordobés Juan Schiaretti, cuyos legisladores acompañarían la medida, y de los mandatario provinciales que se oponen a las Primarias a nivel local.
Preocupados por la maniobra, desde el albertismo lanzan dos advertencias. En primer lugar, que “los números en el Congreso no les alcanzan”. Resaltan que hay legisladores oficialistas que no acompañarían la propuesta. Por ejemplo, los cinco diputados de organizaciones sociales como el Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie, que sin Primarias ven peligrar la posibilidad de presentar candidatos propios a nivel provincial y municipal. «No vamos a votar la derogación de las PASO”, anticipó en ese sentido la diputada Natalia Souto. En segundo lugar, aseguran que –dada la heterogeneidad del espacio– “armar listas a dedo podría romper el Frente”. ¿Y si se presenta Cristina Kirchner? “Nadie va a intentar competirle”, aclaran.
Juntos por el Cambio
En la principal fuerza opositora el rechazo a eliminar las PASO nacionales es unánime. Sin embargo, tiene un plan de contingencia por si ocurre. Incluye cuatro opciones, todas difíciles de implementar. A pedido del expresidente Macri, y ante la suspensión de las Primarias en algunas provincias (Salta y San Juan) y las discusiones en otras (Catamarca, Chubut, Rio Negro, La Rioja), la coalición estableció una serie de alternativas no muy originales: 1. Trabajar en listas consenso. 2. Seleccionar por unanimidad a una consultora de confianza para definir nombres en base a encuestas. 3. Convocar a internas cerradas, solo para afiliados. 4. Dirimir candidaturas en una interna abierta que incluya electores independientes.
Es un esquema que elaboró una mesa de trabajo con representantes de cada espacio: Julia Pomares (jefa de asesores del gobierno porteño); Alberto Föhrig (asesor de Bullrich), Fernando Sanchez (Coalición Cívica) y Andrés Malamud (UCR). “Avanzamos en un documento para discutir con las coaliciones distritales qué hacer en aquellas provincias en donde no haya PASO, pero podríamos discutir un modelo parecido a nivel nacional”, explican en JxC.
En una interna marcada a fuego por las aspiraciones de Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal, junto a la incógnita sobre una eventual participación de Macri, difícilmente se resuelvan las diferencias por consenso o a partir de encuestas. Con afiliados mayoritariamente de la UCR, las internas cerradas tampoco serían una opción. Por lo tanto, prevalece la idea de implementar una interna abierta a todo público (salvo afiliados a otros partidos). “Estas internas son muy difíciles de administrar, es un lío para nosotros, pero no vamos a renunciar a la competencia”, explica uno de los principales armadores del espacio opositor.
No obstante, en el medio, surgen inquietudes. ¿Cuánto pesan los aparatos partidarios? En el radicalismo hacen cuentas y resaltan que el despliegue de su estructura a nivel nacional les puede dar cierto impulso. Más aún si terminan optando por una lista de unidad (detrás de Gerardo Morales o Facundo Manes) frente a un PRO que podría ir dividido (Larreta, Bullrich, Vidal). En el partido liderado por Macri admiten la territorialidad histórica de la UCR aunque relativizan su influencia. «Hoy, tener un afiliado no equivale a tener un votante ”, señalan y subrayan que los independientes tienen en las internas un peso mucho más significativo: “Por lo general, solo entre el 10 y el 15 por ciento de los votantes son afiliados”. Más allá de las dudas y especulaciones, una interna abierta sería el escenario elegido para esquivar la jugada del oficialismo.
La izquierda y los libertarios
El Frente de Izquierda ya anticipó que sus cuatro diputados (PTS y PO) no acompañarán la propuesta. Una postura que le valió críticas desde otras fuerzas trotskistas y el recuerdo de sus críticas a las PASO, cuando denunciaban que era una “intervención del Estado en el seno de los partidos políticos”. “Estoy escandalizada de la postura de Myriam Bregman. Si uno se maneja calculando qué le beneficia en el momento y no lo piensa como un criterio democrático, no es de izquierda, tiene las prácticas del peronismo”, cuestionó la dirigente de la Izquierda Nuevo MAS, Manuela Castañeira. En tanto, Bregman respondió que si bien es cierto que “el sistema electoral tiene muchas falencias, como el piso proscriptivo del 1,5 por ciento», rechaza modificarlo porque considera que el Gobierno está «manipulando las elecciones según sus intereses particulares”.
Los libertarios, por su parte, se ven atrapados en una disyuntiva: apoyar un proyecto legislativo que, como pregonan, permitirá “ahorrar gastos de la política”, u oponerse para no formar parte de una maniobra del oficialismo. En un debate con números ajustados, serán clave los votos de José Luis Espert, Javier Mieli y Victoria Villarruel, que podrían arrastrar el de la diputada Carolina Píparo. ¿Qué harán? Hay quienes toman como anticipo lo expresado los últimos días por el legislador porteño Oscar Zago, que responde a Milei: “Hay que volver al régimen de toda la vida: el que quiere internas que meta la mano en el bolsillo y las pague, no que se las hagan pagar a los ciudadanos”.
El proyecto
Más allá de los cruces y las especulaciones, aún falta que el proyecto ingrese al Congreso. El diputado rionegrino Luis Di Giacomo tenía lista su presentación, pero para no alterar la sensible discusión del Presupuesto 2023, se decidió postergarla algunas semanas. El puente de tiempo le permitirá al oficialismo llegar más ordenado a un debate que se anticipa será espinoso.
Página 12