El salario mínimo hoy es de indigencia y 45.540 pesos según dictaminó la mesa salarial, lo cual ni siquiera alcanza para la compra de alimentos, según los datos oficiales, más aún, dos sueldos mínimos apenas serían suficientes para pagar la canasta básica familiar, que incluye además de comida bienes como vestimenta, calzado y medicamentos (pero no el costo del alquiler).
Con una canasta básica rondando los 90.000 pesos, los trabajadores ven de lejos ésta cobertura de necesidades ya que los salarios están, en un promedio, entre 50.000 y 70.000 pesos, siempre y cuando hablemos de salario en blanco ya que el salario de los trabajadores no registrados es aún más bajo.
Con ésta cuestión aclarada, podemos sí hablar de las condiciones de los trabajadores de cooperativas en Berisso, tal vez el último escalafón de la cadena laboral, con sueldos de 12 mil pesos y unas condiciones laborales propia de la época del exclavismo más ruin.
Amenazas, descuentos desmedidos y la necesidad continua hace que hoy sea uno de los sectores que mas sufren, dejando en el segundo lugar a los «mensualidades» que cobran la «ostentosa» suma de 21 mil pesos, aunque las condiciones laborales son similares.
En éste contexto en el que los trabajadores Municipales piden un lógico y merecido aumento, no muchos recuerdan que el propio estado municipal de Berisso, conducido por el Intendente Fabián Cagliardi, es quien propicia el terreno de la PRECARIZACIÓN EXCLAVA.
Vale la pena hacer el siguiente análisis; según los papeles oficiales, el municipio local no tiene menos de 68 COORDINADORES, con un sueldo promedio de entre 80 y 90 mil pesos, lo que da que con el sueldo de cada «coordinador desconocido» podrían cobrar 7 Cooperativistas y medio por mes y más de 3 pasantes.
También es válido mencionar que las cooperativas son «virtuales» ya que tienen dueño desconocidos y contratos escondidos bajo veinte llaves.