El rodado marca Jeep se encajó ayer pero a pesar de que las horas pasan, la marea no baja y el Río parece empecinarse con el vehículo, mientras su propietario sigue pensando en como lo saca.
Todo comenzó cuando un par de intrépidos hombres quisieron sentir la adrenalina de un todo terreno y se aventuraron por las playas que unen los Balnearios de La Municipal y La Balandra pero el río comenzó a crecer y la engañosa arena se transformó en barro blanco y ahí quedó su travesía, encajada y con el agua subiendo.
Los dos vecinos, quienes quisieron experimentar con la doble tracción de uno de los más emblemáticos “Todo Terreno», creyendo que nada los iba a parar pero la naturaleza siempre demuestra que puede más que el hombre dejándolos varados y a pesar del esfuerzo por sacar el Jeep, nada pudieron hacer.
Por estas horas, se espera que la bajante permita enganchar el vehículo a un malacate y de esta manera retirar un vehículo que va a necesitar una “limpieza general».