MUNICIPALES: Y VOS LOS LLAMASTE VAGOS…

Si hay algo que se destaca en éste nuevo comienzo de gestión, con un recientemente asumido Intendente, es el compromiso de los trabajadores Municipales de todas las dependencias.

Claro que siempre pueden existir excepciones, pero es de destacar como en cada pequeña obra que se va realizando, los empleados Municipales, aquellos a los que la gestión macrista de CAMBIEMOS, encabezada por el Intendente JORGE NEDELA, llamó en más de una ocasión vagos, son los impulsores del trabajo, dándose mañana con lo que hay, para solucionar un problema o colaborar con la necesidad de un vecino.

Tan mal fueron tratados por el macrismo local, que una de las primeras decisiones que tomaron en conjunto fue cambiarles el color a las Delegaciones.

¿Y quién los puede culpar? Si les quitaron derechos, los golpearon, los persiguieron, los acusaron de extorsionadores y hasta los quisieron hacer pelear con el vecino, cuando sostenían que eran los trabajadores los culpables de los desastres que hacían los funcionarios.

Yo se que muchos dirán «y bueno para eso cobran», pero ese es un error en el que CAMBIEMOS te hace caer, cuando te hace creer que vos sos distinto y que por más que no tengas dinero NO PERTENECES A LA CLASE TRABAJADORA, porque cuando entendes que esos son tus pares, tus vecinos, tus amigos y familiares, entendes que los hacían trabajar sin elementos y a fuerza de amenazas.

Nadie puede olvidar cuando no había ni papel en las oficinas y hasta se llevaban las máquinas fotocopiadoras porque el Municipio no pagaba el alquiler. Y vos llegabas y alguien te decía «no podemos hacer su trámite porque no hay hojas» y atrás algún funcionario de CAMBIEMOS te susurraba que no te atendían porque eran vagos.

Hoy faltan elementos, sobre todo maquinaria y vehículos, pero el clima es otro, «vamos a ayudar si trabajan a la par nuestra» dicen los laburantes y en una obra a pura pala de punta y barro, se mezcla el delegado y el obrero categoría cuatro, junto al chofer que vino a dar una mano y algún vecino curioso que terminó agarrando la pala.

Punto aparte merecen los cuatrocientos «empleados familiares y amigos», que introdujo CAMBIEMOS de los cuales muchos no se sabe ni para qué están, pero los otros, esos a los que llamaron vagos, esos y esas que buscan resolver los problemas de los vecinos que van a las oficinas Municipales, esos que arreglan al mejor estilo Mc Gyver las cosas en el corralón o en las Delegaciones, esos que se aguantan un rato más en el laburo, aún sin horas extra, para terminar un trabajo, esos que aún sin todos los elementos son realmente el Corazón de la ciudad.

A esos vos los llamaste vagos. Nosotros les decimos compañeros y compañeras trabajadores y aunque no siempre estemos de acuerdo o compartamos los pensamientos, sabemos que somos de una misma clase, la clase trabajadora, la Histórica, la mítica, la que no pudo arrasar ni la peor Dictadura Militar, la que vos venís a buscar en las elecciones y después desprecias.

Nosotros somos «el PACHI» metidos hasta el pecho en el agua y el barro para solucionar un problema que afecta a los vecinos, somos las mujeres que ponen de su bolsillo para darle a un vecino para el micro o para la leche y vos, vos sos un falso oligarca, nos miras, nos llamas negros vagos y cuando todo está resuelto le pedis el voto al vecino y te sacas una foto, pero no sabes que no te da ni para oligarca, porque nunca serás un Macri, un Peña Braun, un larreta, un Roca o un Mitre.

Los Municipales no son vagos, vago son aquellos que cobraban fortuna y dejaron una ciudad en la quiebra.

Los Municipales son el motor de una ciudad que mucha veces se horroriza más por un reclamo laboral, que por el saqueo de un sin fin de «tramoyas» que armó CAMBIEMOS.

MARCELO MARSICANO