Mientras que desde el oficialismo sostienen que han hecho todo lo que podían para resolver la situación (ver nota aparte) en las filas de los Sindicalistas y del propio Bloque opositor de Unidad Ciudadana surgen desencuentros sobre el apoyo o no al Pacto Fiscal entre el Municipio y la Gobernación.
Aunque nadie sale, por el momento, a decir nada y se enojan puertas adentro, es visible la división de posiciones que surcan tanto a Sindicalistas como a concejales que se juegan, ya no solo una postura a favor u en contra, sino que también se enmarcan en lo que es la lucha por el poder dentro del sector peronista.
Por el lado Sindical, el mayoritario gremio del STM, que dice haber conseguido lo que le pedían a Nedela, es decir que les asegura vía ordenanza no despedir ningún trabajador y consensuar los movimientos de planta, apoyan la aprobación y apelan a que los ediles den quorum, mientras que tanto UPCN y ATE, descreen del pacto firmado, por no creerle a Nedela y porque sostienen que nada de lo firmado en Berisso modifica la ley Provincial, por lo cual esperan que los concejales no le den «el gusto» al Intendente y mantengan su postura de impedir la adhesión al Pacto Fiscal.
También dentro del propio Bloque de UC se ven en desacuerdo de posiciones, ya que desde el «mincarellismo», sin Sebastian Mincarelli que está de vacaciones en Brasil y la Campora, sostienen la posición de no dar Quorum, siguiendo la linea nacional de oposición y al igual que UPCN y ATE, descreyendo del Intendente, mientras que otro sector encabezado por Cagliardi, están más cerca de la postura del Sindicato de Trabajadores Municipales, sosteniendo que han conseguido que se retiren los puntos que perjudicaban a los trabajadores y el compromiso del Intendente.
Seguramente arderán los teléfonos durante las siguientes horas en la Ciudad, y recien mañana, en una nueva sesión del HCD, se sabran las respuestas.