Un audaz golpe fue dado el pasado lunes en un PH ubicado en un sector de Villa Argüello, Berisso. Según supo, las cuatro unidades que componen este complejo habitacional fueron desvalijadas por delincuentes que operaron de forma rápida y coordinada.

El hecho tuvo lugar a plena luz del día en la calle 123 entre 61 y 62. Hay consenso que los atracos se produjeron entre las 10 de la mañana y las 13 horas, horario en el que una de las víctimas retornó y se encontró con la puerta principal vulnerada y con su departamento revuelto.

Si bien el caso es materia de investigación, para las víctimas no se trató de una mera coincidencia.

Es más, sospechan que estuvieron siendo espiados durante varios días por una banda que tomó nota de sus movimientos.

Calculan que de ese modo pudieron establecer una franja horaria en la que todos los habitantes se encontraban fuera de sus moradas, abocados a tareas laborales y de estudio.

Pero tampoco le restan crédito a la posibilidad de que haya existido un entregador. De avanzar esta hipótesis, cobraría una importancia mayúscula el entorno de las personas que allí residen.

Según indicaron las víctimas a la policía, un vecino dejó su casa a eso de las 9.30 de la mañana y los restantes hicieron lo propio media hora después.

Se proyecta que desde esa hora y hasta minutos antes de las 13.00, los malvivientes se dedicaron a romper puertas, revolver habitaciones y reunir varios objetos de valor. Entre ellos se destacan televisores, equipos de audio, mesas, sillas, una garrafa y varios miles de pesos.

Por la envergadura del botín los investigadores dan casi por descontado el uso de un rodado. “Si bien las mudanzas en la zona son comunes por la presencia de estudiantes universitarios, hubiese resultado muy sospechoso ver a varios tipos caminando con varios electrodomésticos al hombro”, explicó una fuente policial dando casi por sentado la intervención de un vehículo.

En ese marco, por estas horas se encuentran analizando las imágenes de cámaras de seguridad de la zona a fin de establecer la identidad de los sospechosos, la dirección que tomaron y, en el caso de que lo hubiese, la chapa patente del auto.

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