Estancias, ferrocarriles, clubes, hoteles, comercios, paradores, convivían en estas tierras costeras a principio del siglo pasado.

Punta Lara tuvo su auge en otros tiempos, una vida que se nos dificulta creer, será porque pocos o casi ningún vestigio queda de ese entonces.
Las sudestadas, las inundaciones tienen ese triste logro, de arrasar sin piedad.
Quizás sea porque caprichosamente nos instalamos en territorio que la naturaleza utiliza cada tanto para sus marejadas y sus vientos.
Quizás sea porque nos atrevemos a desafiarla creyéndonos superiores.
O simplemente unos pocos excesos del Rio se abusaron de nuestra confianza.

Punta Lara fue un lugar con ansias de progreso, de industrias, de comunidad balnearia, con un nivel de esplendor que no conocimos nunca.
Qué intriga si hubiese progresado ese proyecto ¿cómo viviríamos ahora?
Pero lo que importa es, qué es nuestra costa ahora.
Y el ahora depende de cada uno de nosotros en gran medida.
En cómo la cuidamos, en cómo cada uno tiene su vivienda, su higiene, su respeto al vecino, su ganas de progresar para obtener mejor calidad de vida.
Todos podemos hacer una Punta Lara mejor, no depende de otros, depende de mi y de vos.
Tengamos la Mejor Punta Lara que queremos.
Si recordás o te contaron alguna historia de tu barrio que ya no está, compartila a todos nos va interesar saber más!!!

Te dejo mi video ojalá te motive a seguir investigando.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *