Se cumplieron diez años, desde un hecho que quedará en la historia de una de las Instituciones más importantes que tiene la ciudad de Berisso, y es que por estos días se celebra la incorporación de las primeras seis Voluntarias al Cuartel de Bomberos Voluntarios de Berisso.
Ante ello, en la mañana de éste viernes, hablamos en Infoberisso Radio, por Radio Sur 105.1, con una de las «pioneras» y protagonistas de este hecho que forma parte del progreso de la sociedad en materia de igualdad.
«Cuando mi marido Cristian,me dijo,hace 21 años que quería ser Bombero me dió miedo, le pregunté si estaba seguro. Temía,como cualquiera, que le pudiera pasar algo. Pero lo apoyé y empecé a acompañarlo, empecé a ayudar a los Bomberos y cuando surgió la oportunidad, hace 10 años, no lo dude y se lo dije a mi marido, quien me apoyó y ahora estamos los dos en el Cuerpo activo» expresó Claudia Tabernaberry.
«La verdad es que desde el principio los muchachos fueron geniales… Había que hacer cambios. Teníamos que tener un lugar para cambiarnos» rememora Claudia entre risas; «y ahí nomás nos empezamos a acomodar, trabajando todos. Al principio medio que nos cuidaban de más y más de uno se llevaba una empapada de agua por meterse en el medio» dice pícaramente la voluntaria.
Considerada una de los miembros «hiperactivos y trabajadores» por sus compañeros, Claudia define humildemente; «No, no es cierto. Acá trabajamos todos. Esto es un cuerpo y cada cual tiene una función y como tal todos debemos hacer cosas»
La rubia bombera, no se la lleva de arriba a la hora de las bromas, «Fabiola» o «Lilita», son algunos de los apodos que «los pibes» le asignaron por su cabellera y su carácter firme; «yo soy mamá y eso a veces lo llevo al cuartel. Hay chicos muy jóvenes a los que les digo «Yo puedo ser tu mamá» y ellos me contestan; » podés ser mi abuela» y se ríen, así que yo replico que me van a tener que adaptar la autobomba para que me pueda subir con el bastón porque no me pienso ir de la institución… al rato ya los empiezo a joder para arreglar un enchufe, una lámpara o pintar. Pero siempre digo que parece que no tuviéramos diferencia en la edad porque me rejuvenece estar con ellos».
Verborrágica, divertida y con una energía contagiosa, Claudia cuenta que es madre de tres hijos; «En casa cuando suena la sirena salimos con mi marido corriendo y a los gritos; «Vos ocupate de la comida, vos de esto, vos de lo otro y ya están acostumbrados. Al principio el más chico se paraba en la puerta y decía «Ustedes no se van» y nosotros teníamos que convencerlo rápido y le prometiamos traerle algo. Pero ya se acostumbraron, saben bien que tenemos que ayudar a los demás»
Al borde de las lágrimas recuerda momentos duros que a pasado en estos diez años; su primer incendio, su «bautismo de bomberos», pero también, con la misma sensibilidad, recuerda las veces que la gente le dice «gracias», «aún después de perderlo todo y eso te hace bien, te llena el alma».
Con ejemplos de vida claros, como la Jefa del Cuartel del Dock Sud, Claudia sueña con una carrera dentro de la Institución y con que algún día una mujer sea designada jefa en Berisso; «Creo firmemente que las mujeres tenemos las mismas capacidades de manejo que los hombres y algún día llegará ese momento» dice convencida.
«Los pequeños», «los héroes y Super héroes», la familia bomberil, todo forma parte de la charla con esta heroína berissense que alguna vez supo pedirle una foto a su ídola, la jefa de Dock Sud y hoy es ella quien acepta la invitación de cientos de niñas que la admiran y la toman como ejemplo.